“El hecho de que se puedan recomendar ficheros como interlocutores tiene, en primer lugar, un simple motivo que está fundado en los problemas técnico-económicos del trabajo científico. Sin escribir, no se puede reflexionar; al menos no de manera exigente, continuada.”
“Uno de los requisitos elementales para la comunicación es que los interlocutores puedan sorprenderse mutuamente. Sólo de este modo se puede generar información en la otra persona.”
“Si se pretende que un sistema de comunicación mantenga unidos a sus interlocutores por un periodo de tiempo prolongado, hay que elegir el camino de una especialización altamente técnica o el camino de la incorporación del azar y de información generada de forma ad hoc. Aplicado a las recopilaciones de apuntes: se puede elegir entre el camino de una especialización temática y el camino de una instalación abierta. Nosotros nos hemos decidido por la segunda opción y ahora, después de 26 años de una colaboración exitosa que, sólo en ocasiones ha conllevado dificultades, podemos confirmar el éxito o al menos la viabilidad de este camino.”
“Como resultado de un trabajo prolongado con esta técnica, nace una especie de segunda memoria, un álter ego, con el que uno se puede comunicar continuamente. No presenta, y en esto se parece a la propia memoria, ningún orden global construido ni tampoco ninguna jerarquía, ni mucho menos la estructura lineal de un libro. Precisamente por este motivo cobra vida individual e independiente de su autor. La totalidad de los apuntes sólo se puede describir como desorden, pero al menos como un desorden con una estructura interna no arbitraria.”
“Si se pretende cultivar a un interlocutor, está bien dotarlo de autonomía.”
“Por supuesto, tener autonomía requiere disponer de un mínimo de complejidad propia. El fichero requiere varios años para ganar un peso crítico suficiente. Hasta entonces sólo funciona como un recipiente del que se saca lo que se ha metido dentro. Conforme el recipiente crece y que vuelve más complejo, esto cambiará.”
“En todo caso, la comunicación se volverá cada vez más fructuosa, si se consigue poner en marcha la red interna de referencias con motivo de las entradas y consultas de datos. La memoria tampoco funciona como suma de accesos puntuales a datos, sino que utiliza relaciones internas y sólo se vuelve fructífera a este nivel de la reducción de la propia complejidad. De este modo, de forma puntual, se obtiene a través de la búsqueda, con motivo de un impulso de más información que la que uno tenía en mente cuando comenzó la búsqueda; y, sobre todo, más información de la que jamás se habría guardado en forma de apuntes. El fichero ofrece, por motivos precedentes, posibilidades combinatorias que nunca antes habían sido previstas, pretendidas o planeadas de este modo. ”
“Quizás uno se pregunte si de esta manera los resultados de tal comunicación no son también productos aleatorios. Esto sería, sin embargo, una suposición demasiado comprimida. Dentro de la teoría científica la posición del azar es controvertida. Sin embargo, según modelos de la teoría de la evolución, el azar juega un papel primordial. Sin el azar no se puede hacer nada, o al menos no se avanza en nada. Sin variación del ideario existente no hay ninguna posibilidad de revisar y seleccionar innovaciones. Por lo tanto, el verdadero problema se desplaza a la producción de azares con oportunidades lo suficientemente concentradas para la selección.”
Niklas Luhmann: Kommunikation mit Zettelkästen, in: Andreas Kieserling (Hrsg.), Universität als Milieu, Bielefeld 1992, S. 53-61